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miércoles, 11 de mayo de 2016

En los hospitales atienden un parto por día de niñas menores de 14 años

En los hospitales públicos de la provincia una vez por día se atiende un parto donde la madre es una nena de entre 10 y 14 años. Las estadísticas oficiales del Ministerio de Salud indican que, cada año, entre el 2 y 3 por ciento de los nacimientos en el sector público corresponden a esa franja etaria. En números absolutos eso significa unos 360 partos anuales, lo que a nivel nacional asciende a 3 mil.Visibilizar la especificidad de la problemática y las consecuencias sociales y sanitarias que conlleva esa maternidad —en muchos casos forzada o producto de abusos sexuales—, obtener estadísticas certeras y establecer protocolos específicos para esos casos, tanto en los ámbitos de salud como de infancia, son los objetivos que se plantea el Comité de América latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (Cladem) a través del primer informe "Niñas madres", que se llevó adelante en Argentina y otros 11 países de Latinoamérica, y que días atrás se presentó en el Centro de Estudios Igualdad Argentina.Susana Chiarotti coordinó el estudio que tomó datos de la Argentina, pero también de Bolivia, Brasil, Colombia, El Salvador, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico, Uruguay y República Dominicana. "Muchos países no tienen datos certeros de la cantidad de niñas menores de 14 años que paren y tienen hijos, y ese es un primer problema", indicó la especialista. Y de acuerdo a los datos obtenidos, estimó que en Latinoamérica son más de 60 mil las niñas de entre 10 y 14 años que transitan los 9 meses de gestación."Estamos hablando de nenas de 5º y 6º grado, que en más de la mitad de los casos dejan la escuela primaria en una región donde el empleo no abunda, lo que significa la interrupción de su desarrollo y su proyecto de vida, ya que las que se reincorporan lo hacen en espacios educativos de menor calidad", recalcó Chiarotti.A eso se suman, agregó, "las consecuencias de llevar adelante una gestación con un cuerpo que aún no está preparado, multiplicando los riesgos de consecuencias irreversibles e incluso la muerte; el estigma, las situaciones de discriminación que atraviesan y el abandono que sufren una vez que han tenido sus hijos".
Santa Fe. En la provincia los números se mantienen estables en la última década, recalcó el director Provincial de Políticas de Género e Interculturalidad en Salud, Oraldo Llanos.Consideró que se trata de una problemática "muy compleja que exige trabajar para visibilizar a uno de los sectores más vulnerables, como son las niñas, dentro de un grupo ya de por sí vulnerable; que son las mujeres".Contar con datos sobre esa franja etaria específica, discriminada de lo que globalmente se llama embarazo adolescente, "es un primer paso", indicó y admitió durante la presentación del informe que "no existen ni en la provincia ni en el país protocolos específicos para el abordaje".Basado en estadísticas oficiales de la provincia, detalló que "la estimación de partos de adolescentes tempranas, es de decir de niñas de 10 a 14 años, es de uno por día". Ese número representa entre un 2 y un 3 por ciento de los partos anuales atendidos en el sector público (que a su vez asiste el 75 por ciento de los partos adolescentes); en tanto, el 14 por ciento, corresponde a adolescentes de entre 15 y 19 años.Los riesgos médicos en esas maternidades tempranas se acrecientan y, en ese punto, Llanos indicó que "teniendo en cuenta todos los factores y variables que se ponen en juego, pueden llegar a quintuplicarse y poner en riesgo la vida de la madre".A eso se suman las consecuencias sobre el bebé, ya que indicó que "ese 2 por ciento de madres niñas contribuye al 12 por ciento de los bebés nacidos con bajo peso y al 15 por ciento de los nacimientos prematuros", y consideró que "son maternidades con dificultades desde inicio, tanto para las madres como para los chiquitos".A la hora de pensar sobre las situaciones de las niñas que son forzadas a continuar con la gestación, Llanos indicó que "se viene trabajando en la provincia en el acceso a la interrupción legal de los embarazos".Puesto en cifras, detalló que en 2014 se registraron oficialmente 109 casos en la provincia, de los cuales 7 eran de adolescentes tempranas; en tanto, en 2015 fueron 172 y cuatro correspondieron a esa franja etaria.
Penalización. Desnaturalizar el embarazo en las niñas, discriminándolo del embarazo adolescente y logrando estadísticas específicas, es para la coordinadora del informe de Cladem "un primer paso fundamental para poder abordar una problemática que en nuestra región está ligada al abuso sexual y a los escandalosos niveles de impunidad que los abusadores tienen en la Justicia".El reclamo de la organización a nivel nacional y latinoamericano apunta al establecimiento de protocolos específicos, tanto en las áreas de salud e infancia como en la Justicia, además de la penalización de todo aquel que fuerce a una niña a continuar con un embarazo u obstaculice su interrupción.http://www.lacapital.com.ar/en-los-hospitales-atienden-un-parto-dia-ninas-menores-14-anos-n788732

viernes, 17 de abril de 2015

El "bazar de las esposas": compraventa de mujeres en India

Miles de niñas y jóvenes de entre 12 y 21 años son vendidas como esposas en el norte de la India, con la complicidad de intermediarios sin escrúpulos que las raptan o las compran por poco dinero a familias pobres.Miles de niñas y jóvenes de entre 12 y 21 años son vendidas como esposas en el norte de la India, con la complicidad de intermediarios sin escrúpulos que las raptan o las compran por poco dinero a familias pobres.El precio de una esposa virgen, escribió el último número del semanario The Week en una investigación llamada "El gran bazar de las esposas indias", va de las 15.000 a las 50.000 rupias (entre 255 y 820 dólares), según las exigencias y la edad del marido. Pero, si es revendida, como ocurre a menudo, "el precio baja como en todas las otras mercaderías", explicó un mediador oriundo de un pueblo de Rajastán.Una de las razones del fenómeno es el desequilibrio demográfico entre los sexos que en algunos estados del noroeste, como Rajastán y Haryana, es muy elevado, debido a la práctica del feticidio femenino (destrucción.El pueblo de Mewat, a unos 50 kilómetros de Gurgaon -el polo de la alta tecnología de Nueva Delhi- se considera tradicionalmente como un floreciente mercado para el comercio de "paro" (como se llama a las esposas compradas desde afuera).El semanario recogió varios testimonios impactantes de mujeres, procedentes en su mayoría del noreste de la India, que fueron vendidas a hombres inválidos o ancianos en busca de esposas como "esclavas del sexo", o bien para realizar tareas domésticas. Jamila, que ahora tiene 60 años y es oriunda de Assam, recuerda que la primera vez fue vendida a un "marido patrón" que la cambió por una vaca. Ahora vive con su tercer marido, un conductor de rickshaw (un vehículo de dos ruedas que se desplaza por tracción humana), y tiene siete hijos.
Casamiento infantil arreglado en India
Sanija, de 25 años, fue llevada a Nueva Delhi por un "tío" con la excusa de un paseo por el histórico Fuerte Rojo. Pero luego fue vendida a un padre de seis hijos en un pueblo de Haryana. "Fue violada y golpeada, y luego obligada a duros trabajos en los campos y en la casa", contó, hasta que el hombre recuperó las 30.000 rupias que había gastado."El 80 por ciento de las mujeres víctimas de tráfico –explicó un responsable de la ONG Empower People- no tiene ningún tipo de documento o status social. Fueron vendidas y compradas varias veces para trabajar en las casas o en los campos". Como las mujeres se casan legalmente, agregó, "los mediadores no pueden ser acusados de tráfico o explotación de la prostitución".En Madya Pradesh, en India central, cada día desaparecen 15 muchachas, sobre todo las procedentes de las áreas tribales que son las más pobres y atrasadas. Según la policía, el fenómeno de la compraventa de esposas está en aumento debido a la presión social sobre los jóvenes indios, que no hallan un número suficiente de muchachas para casarse y no pueden contraer matrimonio con mujeres de castas inferiores.Los traficantes pensaron así un sistema para satisfacer la demanda de esposas de parte de las familias pertenecientes a la casta de los brahmanes u otras clases sociales. Tras comprar a las muchachas en los pueblos tribales, las "instruyen" según la etiqueta y usanzas de las clases acomodadas y las venden como esposas a las castas elevadas. Para hacer más creíble la pertenencia a una familia de brahmanes, las obligan también a cambiar de apellido. "Aunque conocen los orígenes de las esposas, muchas familias -escribió The Week- no están interesadas en denunciar a los traficantes porque no quieren que se sepa que pagaron para hallar esposas para sus hijos, y también porque a veces las propias mujeres ya son madres y por lo tanto fueron aceptadas por la comunidad".http://entremujeres.clarin.com/genero/violencia-violencia_de_genero-India-genero-esclavitud-esposas_0_1217878299.html

Investigación: el abuso infantil cambia la estructura del cerebro

Descubrieron que las áreas que procesan un abuso sexual quedan "desatendidas" por el cerebro y su aspecto es más delgado. Esto podría tener un efecto protector para el niño, aunque también sería la base de problemas durante su vida adulta, como la disfunción sexual.Una nueva investigación analizó cómo influye el abuso sexual infantil y el maltrato emocional durante la niñez en el desarrollo de diferentes regiones del cerebro. En particular, en aquellas áreas vinculadas con la sensación genital y la autoconciencia. “La disfunción sexual es un síntoma clínico frecuente en las mujeres que fueron víctimas de abuso sexual infantil. El mecanismo exacto que media esta asociación aun es poco conocido”, se resume en el sitio web de American Journal of Psychiatry, donde se publicó el estudio. Los autores evaluaron la relación entre la experiencia del abuso infantil y el adelgazamiento neuroplástico de la corteza cerebral, según la naturaleza de la experiencia de abuso.Para esto, examinaron el cerebro de 51 mujeres adultas y médicamente sanas que fueron abusadas durante su niñez, e investigaron si las diferentes formas de abusos en la infancia se asocian con un adelgazamiento de la corteza cerebral en diferentes áreas.Christine Heim, directora del Instituto de Medicina Psicológica de la Universidad de Medicina Charité de Berlín, y Jens Pruessner, director del centro McGill para Estudios en Envejecimiento de la Universidad McGill de Montreal, fueron los líderes de esta investigación que se basó en la premisa de que el cerebro, al igual que los músculos, se desarrolla a partir de su uso; por eso, las áreas que se “usan” más, suelen ser más gruesas.
Abuso sexual infantil / Foto: Thinkstockphotos
¿Las conclusiones? Descubrieron que la corteza es más delgada en las áreas del cerebro que procesan un abuso, ya que el cerebro las deja “desatendidas”. “Si el abuso fue de tipo sexual, vimos cambios en la corteza somatosensorial, el área (del cerebro) que procesa la entrada desde el cuerpo para crear sensaciones y percepciones”, explicó Pruessner a Time.com, tal como publica CNN. Lo significa que esta corteza (que representa a los genitales) es más fina que el promedio. Mientras tanto, aquellas personas que fueron sometidas a un abuso emocional durante su niñez presentaron un adelgazamiento cortical en las regiones correspondientes al auto-conocimiento y auto-evaluación.Los autores de la investigación (titulada “Disminución de la representación cortical de campo somatosensorial genital después de abuso sexual infantil”) entendieron que esta plasticidad neuronal, este cambio en la corteza del cerebro durante el desarrollo de la persona, “puede tener un efecto protector para el niño que vive en condiciones abusivas, y además puede ser la base del desarrollo de problemas de conducta, como la disfunción sexual, durante su vida adulta”.El abuso sexual infantil se da cuando un adulto o un menor de mayor edad obliga a un niño a mantener contacto sexual. Para lograr su objetivo, el abusador puede emplear la fuerza física, un soborno, amenazas o aprovecharse de la ingenuidad de la criatura.http://entremujeres.clarin.com/hogar-y-familia/hijos/abuso-infantil-cambia-estructura-cerebro_0_956304420.html